“El tiempo pasado con gatos nunca es tiempo perdido.”
Sigmund Freud
“A ojos de los gatos, todo es de los gatos”
La historia, la arqueología, la biología, etc. nos hacen
entender cómo ha funcionado la “domesticación” de los animales. Los estudios científicos
han detectado algunos cambios en la genética de los animales que sería la
causante que los hacen cambiar su comportamiento. Por ejemplo la “cabra
doméstica” (Capra aegagrus hircus) es una subespecie domesticada de
la “cabra salvaje” (Capra aegagrus) y se adaptó de la siguiente
manera: Hace unos 10 mil años atrás, los campesinos de Asia y Europa se dieron
cuenta que la “cabra salvaje” era grande y agresiva, pero de ella necesitaban carne
para alimentarse, leche, piel para abrigarse. Pero la
“cabra salvaje” era agresiva e inquieta y cada vez que nacían cabras más chicas
y dóciles, las iban separando de las otras “cabras salvajes” y juntándolas en
nuevos grupos donde estaban las más pequeñas y dóciles, así mismo de ese grupo a
su vez, nuevamente fueron separando las más pequeñas y dóciles, esto hecho por
años concluyó en las cabras domesticas tal como las conocemos en la actualidad.
Lo mismo sucedió con el lobo y el perro. En general la gran mayoría de los
animales pueden ser domesticados y a su vez ellos se dejan domesticar, es como una
constante en la naturaleza.
Como lo escribió
Antoine de Saint-Exupéry en El Principito, la domesticación implica un vínculo.
Zorro: Soy un zorro
El Principito: Ven a jugar conmigo, estoy tan triste...
Zorro: No puedo jugar contigo, no estoy domesticado.
El Principito: Ah! Perdón. ¿Qué significa "domesticar”?
Zorro: No eres de aquí, ¿qué buscas?
El Principito: Busco a los hombres. Qué significa
"domesticar"?
Zorro: Los hombres (dijo el zorro) tienen fusiles y cazan. Es
bien molesto! También crían gallinas. Es su único interés. Buscas gallinas?
El Principito: No. Busco amigos. Qué significa "domesticar"?
Zorro: Es algo demasiado olvidado. Significa "crear
lazos..."
El caso de los gatos es completamente diferente, las investigaciones
recientes indican que los “gatos
domésticos” han evolucionado del “gatos
montés” y lo más significativo es que evolucionaron
solos, sin participación del hombre. Esto se basa en que no se ha
encontrado grandes entierros de gatos e históricamente se sabe que el hombre no
los come, por lo mismo, nunca han sido de atención excepto cuando se detectó
que su acción depredadora iba en directo beneficio al mantener limpias las
bodegas, casas y siembras de ratones y roedores. Como resultado de esto, se produjo
una conveniente convivencia entre hombre y gato o en gato y hombre.
Tras
secuenciar los cerca de 20.000 genes del “Felis silvestriscatus”, nombre científico
con el que se conoce al gato doméstico, se ha podido observar las
diferencias en términos biológicos, evolutivos y de comportamiento respecto de
otras especies de la familia de los felinos en particular como el gato
montés o el tigre; y otro mamíferos en general, como el perro,
la vaca o el propio ser humano.