“Si buscas resultados distintos, no
hagas siempre lo mismo”
El otro día encontré una mosca que intentaba salir por una ventana de
mi casa. Una y otra vez se estrellaba contra el cristal, pero aun así volvía a
intentarlo. Solícitamente le abrí la ventana de al lado para
facilitar su salida, pero no sirvió de nada. Siguió dándose
golpes con el mismo cristal. Intenté hacerle entrar en razón, pero es
difícil razonar con una mosca. Entonces me puse en su lugar y me di cuenta
que ella no veía el cristal a pesar de golpearse con él, ni aprendía nada
de sus fracasos, porque para ella no tenían sentido.
A veces, los fracasos nos parecen injustos o equivocados, especialmente cuando no asumimos que el error es nuestro y preferimos culpar a otros , o al momento,o buscamos cualquier culpable ... menos nosotros ...
ResponderEliminarComo consecuencia , el fracaso que debiese hacernos reflexionar para corregir , pierde su potencial positivo ...
Cuando alcanzamos la madurez necesaria para aceptar que somos responsables de ese fracaso ... podremos corregir ...
Cuando analicemos nuestro fracaso sin dolor, sin permitirnos minimizar nuestra
culpa, con total
objetividad ... podremos decir que hemos aprendido la lección y ... obviamente... no sumaremos otro
fracaso similar ...